¿Hay vida después de las clases?

Anoche asistí a un concierto. Un concierto de heavy metal, para más señas. Y la verdad es que lo disfruté... excepto por el pisotón que me gané cerca del final, cuando toda la sala botaba en un momento cercano al paroxismo :P

Pero de lo que quería hablar es de lo que sucedió cuando me disponía a abandonar la sala para volver a casa... De entre la gente que había por ahí reconocí a una figura familiar, que también me reconoció a mí y se acercó. ¿Has estado en el concierto?, me preguntó extrañado. Se trataba de un alumno. Supongo que jamás hubiese podido imaginarse encontrar a su profesor en un concierto de ese tipo... Estuvimos hablando unos minutos, una conversación bastante animada, incluso me preguntó por mi edad... :)

Pues sí, parece que cuando salimos de clase los profes también tenemos vida. Y es que en el fondo no somos tan raros...


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